«Voy a contar una historia con la baraja de cartas»: así comienza el vídeo que ha hecho viral la habilidad del seminarista Raúl Chasco con los naipes. La historia es la de Jesús de Nazaret y, para contarla, Raúl se vale del valor de las cartas de la baraja inglesa: la dama es la Virgen María, Jesús es la J, tres reyes son los Magos de Oriente… Pasa por las ocho bienaventuranzas, el perdón concedido 70 veces siete, o las 99 ovejas de la parábola, hasta el as de corazones como el corazón de Jesús o el as de picas como la lanza que lo atravesó.
Este despliegue de originalidad corre a cargo de un joven español de 20 años originario de La Rioja y actualmente estudiando para ser sacerdote en el seminario del Instituto del Verbo Encarnado (IVE) en Italia. «Desde pequeño me llama la atención todo el mundo de los trucos de magia, afirma en entrevista con Alfa y Omega. Empecé como un juego y poco a poco fui estudiando más, con libros y espectáculos y también hablando con otros magos».
Chasco se confiesa más versado en trucos con la baraja, «pero también hago otros con cuerdas, aros o pañuelos. Lo que aún no he probado ha sido a trabajar con conejos o palomas», dice entre risas.
Sobre la original historia de Jesús contada con las cartas, dice que «empezó a rondarme la idea el año pasado, porque me preguntaba cómo podía usar este talento que Dios me ha concedido para poder llevar a Cristo a las almas». Continúa relatando que «me di cuenta de que la imagen o el número de muchas cartas podían relacionarse con aquello que Cristo enseñó. Poco a poco lo fui construyendo, quitando y añadiendo elementos, hasta dejar la historia como está».
«Lo que yo no pensaba es que se fuera a hacer tan viral», afirma sorprendido el seminarista del IVE. «Pero lo bueno es que, con la excusa del truco de magia, al final estás haciendo llegar el Evangelio a muchas personas». De hecho, «es el mensaje de Cristo lo que es realmente atractivo». En la actualidad está preparando nuevos modos de evangelizar y de llevar a más gente lo que él denomina «trucos catequéticos».
Chasco pertenece al Instituto del Verbo Encarnado, que tiene como carisma la evangelización de la cultura. Hoy estudia segundo curso de Filosofía y comparte su formación con su hermano mayor, también seminarista. Siguiendo su carisma, afirma que «queremos entrar en todos los aspectos de la cultura y con ellos llevar a Cristo a la sociedad. Es lo que yo intento hacer, en mi caso a través de la magia. Creo además que es un fenómeno que ayuda mucho a acercarse a los jóvenes y hacer apostolado con ellos», concluye Raúl.
Fuente: Alfa y Omega