Beauraing y Banneux

Dos desconocidas apariciones, casi simultáneas, de la Virgen en Bélgica y su profética señal

06 de diciembre de 2013

Como "Madre de Dios Inmaculada" se presentó en Beauraing y doce días después como "Virgen de los Pobres" en Banneux. La coherente unidad de ambas apariciones da respuesta en sus mensajes, a la crisis que padece la sociedad de nuestro tiempo.

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Tras 15 años de aparecerse en Fátima (1916 a 1932), la Santísma Virgen María se manifestó en Bélgica en dos apariciones. Primero en la aldea de Beauraing  a cinco niños. Luego, doce días después de aparecerse por última vez allí, se presentó en la aldea de Banneux -distante a 85 kilómetros de la primera- ante una sola niña vidente. Ambas apariciones han sido reconocidas por los obispos de las respectivas diócesis y la Santa Sede.
 
Había terminado la Primera Guerra Mundial y el mundo entero pasaba por la Gran Depresión. Poco podían imaginarse que pronto vendría otra guerra peor. ¿Es accidental o significativo que ambas apariciones transcurran además en los mismos días cuando Adolf Hitler es nombrado Canciller de Alemania por el Presidente Hindenburg (30 de enero de 1933)? Este fue el marco histórico de la visita de la Madre de Dios en Bélgica.

¿Por qué dos veces casi continuas y en Bélgica?
 
Al respecto del sentido de ambas apariciones, el periodista y escritor español César Uribarri en una columna escrita el 2011 para Rel, se interrogaba...

“¿Por qué la Virgen se aparece dos veces seguidas en la misma nación? De entrada hay ciertos hechos que nos desconciertan por su trascendencia futura y que tienen a esta nación como protagonista. De las colonias belgas, en concreto del llamado Congo belga, salió el uranio que enriqueció las bombas atómicas arrojadas sobre Hiroshima y Nagasaki. Y años después Bélgica será elegida como la nación en cuyo territorio resida la cabeza administrativa de la Unión Europea futura, Bruselas”.
 
Lo concreto es que en Beauraing la Madre de Dios se presentó como la “Virgen Inmaculada” que rosario en mano convocaba a la oración prometiendo que ella convertiría a los pecadores. Luego en Banneux, también con el rosario, como la “Virgen de los Pobres”, señalando que una fuente de agua del lugar estaba desde ese instante disponible para que toda la humanidad encuentre allí la salud de alma y el cuerpo.
 
Como veremos, además del contexto histórico en que ocurren ambas apariciones, existe una coherente unidad con Lourdes, Fátima y nuestro tiempo, que trasciende la no menos importante coyuntura en que la Santísima Virgen se aparece…

Signos y su sentido en ambas apariciones. El vínculo con Lourdes y Fátima…

Rosario (en Beauraing y Banneux como en Lourdes y Fátima): Devoción que con maternal insistencia la Madre de Dios pide a todos los fieles incorporar como oración cotidiana. Si recorremos los dichos de la propia Santísima Virgen al respecto se concluye que el rosario nos lo regala por ser: Instrumento de gracias que en el recorrido de sus misterios educa en la fe y moldea el alma para alcanzar la salvación; siendo también medio predilecto para sanar, liberar, exorcizar a Satanás como a todo demonio y lograr dones extraordinarios que manifiestan el Amor y Omnipotencia de Dios.
 
Corazón de oro (en Beauraing como en Fátima): El corazón expuesto de la Santísima Virgen, signo sensible de su ser mediadora de la misericordia de Dios y del dolor que por acción u omisión, cualquier acto pecaminoso de sus hijos le causa.
 
Fuente de agua (en Banneux como en Lourdes): El agua de la vida es Cristo y María, su Madre, nos convoca a ir hasta esa fuente (señal sensible de Dios mismo) que todo lo sana, de quien provienen todas las Gracias para la salvación.
 
Todos son convocados por la Madre de Dios (En Beauraing y Banneux, como en Lourdes y Fátima): En Beauraing se aparece a niños creyentes por medio de quienes convoca a todos los fieles a dar testimonio de conversión (rezar el rosario, sacrificios de expiación). En Banneux se aparece a una niña no criada ni formada en la fe y por su medio ofrece el consuelo del “agua de la fuente” a toda la humanidad enferma en su cuerpo y en su alma (negación de Dios).
 
Los videntes: Tanto los cinco niños videntes de Beauraing, como la niña vidente de Banneux, al casarse señalaron con ello que la invitación a la santidad es una gracia disponible y accesible para todos. En particular confirman al matrimonio como lugar de santidad.
 
Reflexionando sobre el sentido de ambas apariciones, Uribarri destaca en su columna ya citada que “en Beauraing la Señora reclamó oración y penitencia como únicas armas para evitar la catástrofe” que implica para la humanidad dar la espalda a Dios.
 
“En cierto modo Beauraing –dice Uribarri- es promesa y misión. Convertiré a los pecadores, pero sacrificaos por Mi. Como si la Virgen hiciera ver la trascendencia de la colaboración de sus hijos, pero una colaboración más allá de las estrategias. Más aún, al margen de toda estrategia. La dureza del nazismo posterior confirmó la importancia del mensaje: sólo la oración pudo evitar el terrible flagelo, pero el dolor pisó tierras europeas como nunca antes. Entonces, nazismo y la segunda guerra mundial, hicieron evidente la gravedad de la falta de oración y de sacrificios”.


 Para el autor Banneux es (para nuestro tiempo) “símbolo de una esperanza justo cuando no hay otra esperanza… cuando se comienza a evidenciar que este sistema fundado sin Dios sobre el que se ha construido el ídolo del dinero amenaza colapso, cuando la falta de oración y de penitencia constate el advenimiento de sufrimientos, entonces, cuando nada parezca tener solución, cuando sólo quede la pobreza de los días, no quedaremos huérfanos, porque Ella, la Reina de los Pobres, hará evidente cuales sean esas aguas dadas para sanación de todas las naciones". 
 
También Papa Juan Pablo II habló el año 2000 de la actualidad del mensaje dado en Banneux:
 
“Algunos años antes de la segunda guerra mundial, en 1933, María aparecía en Banneux como mensajera de la paz. Exhortaba en cierto modo a los protagonistas de la sociedad a convertirse en artífices de paz y en educadores de los pueblos, invitando a todo hombre a asistir a sus hermanos, a los más humildes, a los más despreciados y a los que sufren, porque son los predilectos de Dios. También hoy tenemos que rezar para que «María, mediadora de gracia, siempre atenta y solícita para con todos sus hijos, alcance para la humanidad entera el don precioso de la concordia y de la paz»”.



INMACULADA MADRE DE DIOS, NUESTRA SEÑORA DE BEAURAING
 
La historia

En Bélgica, a 120 km. de Bruselas, se encuentra el pueblo de Beauraing que jamás había llamado la atención del mundo antes de los sucesos prodigiosos del año 1932.

En el jardín del pensionado de las hermanas de la Doctrina Cristiana se apareció la Virgen María, más de treinta veces, a cinco niños de la localidad, desde el 29 de noviembre de 1932 hasta el 3 de enero de 1933.
Estos niños pertenecían a dos familias distintas: los Voisin y los Degeimbre. Eran niños semejantes en todo a los del resto del pueblo, ni más juiciosos, ni más piadosos. Con decisión y firmeza declararon unánimemente delante de los jueces más diversos, que una Señora, la Santísima Virgen María, se les aparecía y les hablaba.
 
Lo que la Virgen comunica

Los dos primeros días, la aparición se manifestaba lejos de los niños, quienes la veían ir y venir por el jardín sin decirles nada. Más tarde se aparecerá tan sólo durante el rezo del Rosario, que ellos tomaron la costumbre de recitar mientras esperaban su venida.
 
El día 21 de diciembre de 1932, declaró: "Yo soy la Virgen Inmaculada"; y el día 23, respondiendo a la pregunta de por qué venía, la Virgen contestó: "Para que se venga aquí en peregrinación". También pidió que se hiciese oración: "Rezad, rezad mucho. Orad siempre" y dijo a los que niños que deseaba una capilla.
 
Finalmente, el 2 de enero de 1933, anuncia la Virgen: "Mañana diré una cosa a cada uno en particular".
 
El 3 de enero de 1933 A los tres más jóvenes, la Virgen les confió un secreto que nunca ha sido revelado. También le dijo a Andrea: "Yo soy la Madre de Dios, la Reina de los Cielos. Orad siempre". Y a Gilverta Voisin le confía la gran promesa para los que acuden en peregrinación a Beauraing: "Yo convertiré a los pecadores".
 
Las últimas palabras fueron confiadas a Fernanda: "¿Amas a mi Hijo? ¿Me amas a mí? Entonces sacrifícate por mí".
 
Descripción de la Virgen dada por los videntes

La aparición representa tener de 18 a 20 años. Su vestido es largo y blanco, de armoniosos pliegues, sin cinturón y atravesado en oblicuo de arriba abajo por un rayo azul celeste. Siempre guarda las manos juntas y los ojos los mantiene fijos en el cielo. De sus brazos cuelga un rosario. Durante las últimas apariciones, al abrir sus brazos para despedirse, se deja ver en el centro de su pecho un corazón de oro envuelto en rayos resplandecientes.
 
Reconocidas estas apariciones por la Santa Sede, desde 1943 se permitió dar culto y honrar a María bajo la advocación de Nuestra Señora de Beauraing.
 
Fiesta

22 de agosto. 

Descubre la aparición de Beauraing en video





VIRGEN DE LOS POBRES, NUESTRA SEÑORA DE BANNEUX
 
La historia

Desde el 15 de enero al 2 de marzo de 1933, en la aldea belga de Banneux, apenas un caserío en torno a una iglesia, la Virgen se aparece en 8 ocasiones a Mariette Beco. Su familia vivía en condición de extrema pobreza, a un kilómetro de la iglesia (en un sector llamado ‘La Fagne’ por la característica fangosa del terreno), y no eran de hábitos religiosos. Tampoco la niña Mariette había sido criada ni educada en la fe, cuando a sus once años fue visitada por la Santísima Virgen María.
 
Lo que la Virgen comunica

En la primera aparición nada audible para Mariette dice la Virgen, pero la ve mover los labios. Aunque la oración no era parte de su vida, el impacto provoca que de inmediato la pequeña de 11 años comience a rezar el rosario y en los días siguientes a participar en las clases de catecismo. También su padre, al ser testigo de lo que vivía su hija, experimentará una conversión y retorno a la vida de fe que sorprenderá al sacerdote del lugar.
 
En la segunda aparición el 18 de enero, la Virgen llama a Mariette hasta una fuente de agua cercana y le dice: “Posa tus manos en el agua”… “Esta agua me está reservada”. Al día siguiente, 19, le dirá: “Yo soy la Virgen de los Pobres… el manantial es para todas las naciones, para los enfermos”.
 
Finalmente, en las apariciones restantes, la Virgen de los Pobres señala su deseo de que se construya en el lugar “una capillita”. “Vengo a aliviar el dolor... Creed en mí, yo creeré en vosotros… Yo soy la Madre del Salvador, Madre de Dios, Rezad mucho”, fueron los mensajes últimos.
 
El 22 de agosto de 1949, monseñor Louis-Joseph Kerkhofs, obispo de Lieja-Bélgica, reconocía definitivamente como verídicas de las apariciones de la Virgen de los Pobres en Banneux.
 
Descripción de la Virgen dada por la vidente Mariette (fallecida el 2 de diciembre de 2011)

"Era una Señora muy hermosa, con un vestido blanco, una faja azul en la cintura, un rosario colgado del brazo, las manos juntas por las palmas a la altura del pecho, la cabeza inclinada hacia la izquierda y una rosa sobre el pie derecho. La cruz del rosario era del mismo color oro que la rosa sobre sus dedos".

Fiesta

15 de enero.
 
Descubre la aparición de Banneux en video





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